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En el reciente proceso de negociación mantenido con la dirección del Grupo Unidad Editorial, por parte de los delegados de CCOO en las empresas del grupo y de los que han formado parte de la Comisión de Diálogo y Negociación, se ha desarrollado el máximo esfuerzo y empeño para que las bajas sean las menos posibles, con una indemnización buena para capear la situación actual del mercado y para que todo o parte de lo dejado de percibir se recuperase

Finalmente, la Comisión de Diálogo y Negociación firmó el pasado 29 de abril un preacuerdo con la dirección de Unidad Editorial sobre el plan de reducción de costes propuesto por la empresa a finales de enero. El preacuerdo fue aprobado por cerca del 78% de los votos emitidos tras una asamblea de trabajadores conjunta del grupo Unidad Editorial, que se celebró el 6 de mayo, y que contó con una participación de más del 60% de la plantilla de la compañía, integrada por 2.100 trabajadores.



El acuerdo, que desde CCOO y la Comisión de Diálogo y Negociación consideramos el más responsable dentro de la coyuntura de crisis publicitaria que afecta al sector de medios de comunicación, incluye una serie de ajustes salariales de forma proporcional en función del salario, que afecta a toda la plantilla. De ese modo, se logra minimizar el número de bajas que se producirá en la empresa hasta un máximo de 180, cantidad que contrasta con la cifra inicial barajada por la dirección del grupo en un inicio, que superaba los 400 despidos.



El acuerdo firmado, cuya vigencia expira el 31 de diciembre de 2011 y que contempla un plan de reajuste para volver a obtener todo o parte del dinero y todos los derechos perdidos durante este periodo, incluye un plan de bajas voluntarias para reducir lo máximo posible las extinciones forzosas. El número de personas que se acoja al plan de bajas voluntarias reducirá automáticamente el tope máximo de 180 extinciones. Además, el pacto contempla mecanismos de recolocación para que los despidos forzosos puedan reducirse por cualquier vía posible. Las indemnizaciones, tanto para las bajas voluntarias como para las forzosas, ascienden a 42 días por año trabajado, más 10.000 euros lineales. La cantidad lineal la percibirán los empleados con, al menos, dos años de antigüedad. El instrumento para organizar el acuerdo será un Expediente de Regulación de Empleo (ERE), que es la única fórmula legal para realizar el citado número de extinciones en la compañía.



Los delegados de CCOO de las empresas de Unidad Editorial consideran que el acuerdo alcanzado es el menos malo posible tanto por las fórmulas que incluye para minimizar los despidos forzosos como por los mecanismos de control del dinero y de las condiciones perdidas, de forma temporal, durante su vigencia, pero al mismo tiempo hacen responsable de las salidas forzosas única y exclusivamente a la dirección del grupo y a su gestión, que no hubieran tenido problema en despedir a quien hubiera hecho falta por ahorrar los 30 millones de euros.

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