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Asunción – Paraguay, 16 de agosto de 2017.-

Las y los trabajadores de la red multinacional de Santander repudiamos las prácticas de injerencia política del Grupo, de mayor o menor sutileza, en algunos países de América donde Santander opera. Así, se han constatado acciones en Brasil y Argentina en procura de incidir en procesos electorales, aspecto fundamental de la democracia que corresponde a sus ciudadanos dirimir sin interferencias externas en el libre ejercicio democrático.

A su vez repudiamos el papel que el Banco Santander jugó en la financiación de la deuda insostenible del Estado de Puerto Rico y su posterior rol en la Junta de Control Fiscal designada por el Gobierno Federal de los Estados Unidos que decidirá el posterior cobro de la deuda en claro conflicto entre el interés público y el interés privado, uno de los factores que incidirá en la distribución de los costos de la crisis.

Exigimos al Grupo Santander la firma de un acuerdo de neutralidad con el sindicato Communications Workers of America que garantice que las y los trabajadores de Santander en EE.UU. puedan decidir genuinamente su sindicalización.

Declaramos la solidaridad entre nuestras organizaciones y nos comprometemos a realizar acciones coordinadas en defensa de los derechos  de los trabajadores así como la defensa de las garantías e instituciones democráticas en cada uno de nuestros países.