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Desde su fundación en 1987, el Sindicato Nacional de Trabajadores de Brinks de Colombia, SINTRABRINKS, ha librado una batalla sindical en respuesta al continuo intento de la multinacional estadounidense Brinks de fraccionar al sindicato.

Desde sus inicios, SINTRABRINKS, afiliado a la UNI, ha visto reducido el número de sus afiliados. El uso de pactos colectivos con beneficios económicos superiores para los trabajadores no sindicalizados, los despidos arbitrarios, las demandas judiciales contra el sindicato y otras violaciones de los derechos sindicales fueron desestimulando la acción sindical, pero un arduo trabajo por parte de dirigentes y afiliados ha resultado en conquistas.

En 2015, mediante instancias judiciales, el sindicato logró reintegrar a once trabajadores sindicalizados. Siete de ellos habían sido despedidos por haberse afiliado al sindicato, mientras que los otros cuatro habían sido despedidos ilegalmente por encontrarse con su salud disminuida.  El sindicato obtuvo una compensación de 120 millones de pesos colombianos en favor de los trabajadores por la violación de Brinks al derecho de asociación sindical y al derecho de reunión. A día de hoy existen trámites destinados a sancionarlos por reiteración de estas conductas antisindicales.

Asimismo, el sindicato ganó tutelas por violación al derecho de petición, por la negativa de la empresa de entregar copia de los contratos laborales de varios trabajadores. Igualmente, SINTRABRINKS logró que la empresa fuera sancionada por incumplimiento de la jornada máxima legal, ya que obligaba a los trabajadores a realizar jornadas de 16 y 17 horas continuas.

John Gómez, Presidente Nacional SINTRABRINKS Colombia, fue partícipe de los logros alcanzados y de la confianza que ha ganado el sindicato.

“Progresivamente encontramos que los trabajadores empiezan a entender que la sindicalización no es delito, que esta organización realmente nos defiende, que es momento de pensar en el bienestar colectivo”, indicó.

“En Colombia es muy difícil aún materializar el derecho de asociación y la libertad sindical de manera plena, pero cuando entendemos que poco a poco estamos cambiando un país todo vale la pena. La lucha sindical no es fácil, pero en SINTRABRINKS estamos seguros que defenderemos con absoluta dignidad los derechos de los trabajadores”, concluyó.

La mayor participación de trabajadores en el sindicato es consecuencia de la buena gestión y la confianza que ha sabido construir SINRABRINKS. El sindicato aumentó su número de afiliados de 180 trabajadores, con representación mayormente en Bogotá, a 420 afiliados a nivel nacional. Actualmente el sindicato cuenta con subdirectivas sindicales en Bucaramanga, Cali, Santa Marta, Armenia, Medellín, Montería, Barranquilla, y con la reciente constitución de la subdirectiva en Valledupar.

Son 28 años de una organización sindical que mediante el esfuerzo y la lucha ha sabido defender los derechos de las y los trabajadores. UNI Américas celebra estas victorias de todas y todos y seguirá velando para que las empresas cumplan con la legislación nacional e internacional en materia de derechos humanos.