Se abre el camino al fortalecimiento del diálogo social en Colombia
Bogotá, 18 de noviembre de 2011. “Queremos un mundo libre de miedo, en el que los empresarios puedan ejercer su función de fortalecer la economía y los sindicatos puedan defender los intereses de los trabajadores, en una comunidad a la que todos pertenecemos”, señaló Adriana Rosenzvaig, Secretaria Regional de UNI.
Lo hizo al concluir el Foro Promoción del Diálogo Social en la Economía del Sector de los Servicios, realizado hoy en el Hotel Royal Park de la ciudad de Bogotá y que contó con la asistencia de representantes del gobierno, empresarios y sindicatos, quienes resaltaron la importancia del diálogo social como instrumento democrático para la cohesión social, en la perspectiva de una sociedad en equidad.
Este comenzó con palabras de la citada Secretaria Regional de UNI y del Sr. Angelino Garzón, Vicepresidente de la República de Colombia, quien en su intervención destacó "el país muestra una alta tasa de crecimiento económico, pero necesita un crecimiento con inclusión social" y "en Colombia se necesitan trabajos dignos y contratos estables. Los trabajadores temporales tienen miedo por su futuro".
Los participantes del evento desarrollaron a lo largo de tres paneles: "Derechos humanos, laborales y sindicales en Colombia"; "Diálogo social en las Américas. Retos en Colombia" y "Trabajo decente", la importancia que tiene para el país resolver sus conflictos y desafíos de una manera inclusiva y democrática.
Los ponentes expusieron desde el actual panorama social de los colombianos, donde la pobreza alcanza el 45,5% y la indigencia el 16,4%, aún cuando el crecimiento económico en 2010 fue de 4,3%, hasta el tema de derechos humanos donde se destacó que a pesar de los esfuerzos del gobierno por propiciar el diálogo social, permanece la violencia sistemática en contra de los sindicalistas. Según el informe de la CSI, Colombia sigue siendo el país más peligroso para ejercer la actividad sindical, y el 60% de sindicalistas asesinados anualmente en el mundo, son colombianos.
Frente al tema de trabajo decente, los panelistas coincidieron en afirmar que el diálogo social es un vehículo para transformar las relaciones laborales y un elemento fundamental para lograr el trabajo decente. Esto bajo un clima de confianza que posibilite el diálogo social y que respete y aplique los derechos laborales de los trabajadores.
Por otra parte, el ejemplo a resaltar fue la constitución del sindicato de Carrefour, que ya cuenta con cerca de 800 trabajadores afiliados, en un claro avance de la empresa por replantear su política laboral, eliminar las Cooperativas de Trabajo Asociado para los empacadores y autorizar la fundación de una organización sindical.
Finalmente, en medio de un ambiente esperanzador para lograr los cambios esperados, el gobierno manifestó que el diálogo social es una política de Estado, y un objetivo a mediano y largo plazo, mientras que la UNI resaltó que este es el inicio de un camino que abrirá la posibilidad de mecanismos eficaces de participación en la construcción de la democracia.