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El objetivo: lograr condiciones dignas para los trabajadores del sector.



Con aproximadamente 200.000 trabajadores, que sirven a 565 empresas de vigilancia y transporte de valores, el sector de seguridad es uno de los más importantes generadores de puestos de trabajo en Colombia. El 90 % de esos trabajadores registrados por las 373 empresas de vigilancia armada, 186 de vigilancia no armada y seis de transporte de valores, son vigilantes o tripulantes de carros transportadores de valores.

El sector de la vigilancia y la seguridad privada ha mostrado una dinámica de crecimiento sostenido y progresivo en los últimos años. Por ejemplo, mientras en 1994 existían en el país 763 servicios de vigilancia y seguridad privada, para el año 2011 ya eran 4.338, un aumento exponencial que tiene como factor causal el aumento de empresas de asesoría, consultoría e investigación, así como de la inscripción de equipos tecnológicos.



Otro aspecto que da cuenta del crecimiento en el sector es el de ingresos obtenidos. Mientras en 2007 el sector registró ingresos operacionales por $3,1 billones, en 2011 fueron por $4,9 billones, señal indicativa del ritmo de crecimiento de esta rama de negocios que mantiene una tasa de crecimiento de alrededor del 14% anual (Supervigilancia, 2011). En términos de participación porcentual en el PIB ha significado pasar del 0,73% al 0,82%.



Sin embargo, el crecimiento sostenido del sector tanto en ingresos operacionales, utilidades y generación de empleo, no han ido de la mano de condiciones de trabajo digno y decente. Muestra de ello es el número de sanciones, querellas administrativas ante el Ministerio del Trabajo e irregularidades que se presentan de manera frecuente. Una reciente investigación efectuada por la UNI Américas y la Escuela Nacional Sindical (ENS), junto con la Coordinación Nacional de Sindicatos del sector, reveló una serie de situaciones, tales como largas jornadas laborales, penosas condiciones de trabajo, serios problemas de higiene y seguridad, dificultades para hacer inspecciones laborales por parte del Ministerio de Trabajo, violación de derechos humanos y sindicales, en particular el derecho a la sindicalización y la negociación colectiva.



La Procuraduría General de la Nación y el Ministerio del Trabajo, presentes en el Foro, reconocieron la necesidad imperiosa de desarrollar esfuerzos para articular mecanismos de interlocución, para transformar las relaciones laborales en el sector de la seguridad privada. William Guzmán García hablo en representación de los sindicatos de la seguridad privada. "Me llena de pena ver las cifras de ganancias de este sector y saber que los trabajadores sufren de condiciones de trabajo precarias y sus salarios no alcanzan para alimentar a sus familias", reflexiono durante su intervención.



"UNI Américas propone la firma de un Acuerdo por el Trabajo Decente en este sector", dijo Adriana Rosenzvaig, Secretaria Regional. " Las cifras de sindicalización en Colombia son alarmantemente bajas, pero en este sector son aun menores. Tenemos la necesidad de revertir esta situación, porque solo con sindicatos fuertes tendremos condiciones de trabajo dignas".



Alice Dale, Jefa de UNI Servicios de la Propiedad, subrayo que es muy alentador ver a tantas empresas en este Foro. "Prosegur no está aquí, demostrando nuevamente su total falta de compromiso con el dialogo social", indico. Prosegur tiene un extenso record de violación a los derechos sindicales y laborales en Colombia.