Visión sobre el empleo reducirá desigualdades
El llamamiento de Jennings relativo a un aumento salarial para los trabajadores tuvo resonancia en Davos. Durante una sesión sobre la manera de reducir la desigualdad de la distribución de la riqueza, Stiglitz y otros ponentes estaban de acuerdo con Jennings en que la desigualdad de salarios no solamente era obscena, sino que también frenaba la recuperación económica. Roger Martin, académico de negocios de alto nivel, dijo que los trabajadores y los sindicatos habían sido los “daños colaterales” del cambio de poder.
Jennings dijo: "Se concuerda en que hay que aumentar los ingresos de la gente - el 99% necesita un aumento salarial"
"Los excesos financieros han traído consigo la desigualdad y la inestabilidad económica", dijo Stiglitz.
En la moción se dice que los partidos laboristas tradicionales han cortado el puente con las preocupaciones de los trabajadores. Ha habido un cambio de poder y hemos visto los daños colaterales. Los partidos de la derecha se han asociado con la élite o el talento, que ha obtenido altas recompensas.
Stiglitz dijo que la sociedad está pagando un alto precio por la forma en que ha aumentado la desigualdad. Dijo que estos niveles de desigualdad son evidentes en los Estados Unidos, donde la leyenda de que los Estados Unidos son una tierra de oportunidades económicas ya no suena posible hoy. El economista ganador del premio Nobel dijo que los que estaban ganando en la cumbre eran los "especuladores" - personas que tienen acceso a los recursos naturales e instituciones financieras - porque realizan enormes ganancias sin contribuir.
Stiglitz agregó que no debíamos aceptar estos niveles de desigualdad, que no tenía por qué ser así, que esto podía solucionarse.
Jennings expuso una visión de cómo podía arreglarse el sistema económico dañado, pero dijo que primero debía permitirse a los sindicatos seguir adelante con su labor. Jennings concluyó diciendo “Yo no puedo llevar a cabo mi trabajo como dirigente sindical para mejorar la vida de los trabajadores, si a éstos no se les permite organizarse, como sucede en Wal-Mart en los Estados Unidos. Es el momento de que la empresa y el gobierno se den cuenta de que los sindicatos son parte de la solución para remediar la crisis. Es evidente que el efecto de goteo de la riqueza de la élite hacia el 99% no ha funcionado, obstruido por el interés propio. Necesitamos un sistema alternativo basado en pilares fuertes, incluyendo un salario digno, la paridad de género, una red de seguridad social y una cadena de suministro eficiente en la que prevalezca el respeto de los trabajadores y no que se abuse de ellos. Necesitamos educación y formación para equipar a los jóvenes con las capacidades necesarias para que efectúen un trabajo de calidad. Tampoco hay que olvidar el potencial de los empleos verdes. Tenemos que asentar firmemente estos pilares y entonces estaremos en posición de reducir las desigualdades, pero solamente si las empresas cambian de comportamiento y los gobiernos empiezan a gastar bastante más que el 1% actual del PIB destinado al mercado laboral activo".
En una sesión posterior, presidida por Ban Ki Moon, Secretario General de las Naciones Unidas, Jennings insistió en que se pusiese el empleo en un lugar prioritario del programa de las Naciones Unidas.