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Los comercios y tiendas de Boots han decidido introducir unilateralmente iniciativas de reducción de costes, las cuales tendrán un impacto negativo en sus trabajadores, afiliados a nuestra organización. A pesar de haber logrado beneficios récord (nada menos que 20 millones de euros tan sólo en Irlanda), la empresa quiere imponer una serie de medidas restrictivas al personal, incluidos recortes salariales y condiciones laborales menos favorables.



El sindicato Mandate, miembro de UNI, no tolerará este intento oportunista de aprovechar la recesión en prejuicio de los trabajadores, sobre todo en el caso de una empresa tan rentable, que posee más de 70 millones de euros en reservas de efectivo y que sin lugar a dudas sigue siendo más lucrativa que nunca.



Actualmente, Mandate está sometiendo a votación entre nuestros miembros en Boots una acción de huelga y es imprescindible cerrar filas y solidarizarnos para dejar claro que los trabajadores y trabajdoras irlandeses y sus familias no tienen ninguna intención de sacrificarse en aras del lucro y la codicia sin límite de la patronal.



¡Apoyar a UNI y firmar la petición de Boots AHORA MISMO!