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Lorenzo Barco Roos, de 52 años, quien laboraba para la empresa Dragon Security, S.A., se convirtió en la víctima más reciente en la industria de la seguridad privada en Panamá. Al igual que los más de 200 fallecidos a lo largo de los últimos años, el agente de seguridad Barco Roos fue asesinado para robarle el arma de reglamento, según arrojan las primeras investigaciones. Al momento en que le dispararon se encontraba custodiando fuera del Hotel Carlton, en la ciudad de Colón, cabecera de la segunda provincia de mayor actividad económica en Panamá. El lamentable hecho ocurrió el pasado sábado 17 de octubre, en horas de la noche.

Según testigos, Lorenzo Barco no tuvo tiempo para desenfundar el arma de reglamento, sin embargo, no se la dejó quitar y la defendió con su vida. Herido con el impacto de bala en el pecho, arrastró el arma de fuego hasta la escalera del hotel y alcanzó a explicar a miembros de la Policía Nacional quién fue su homicida. Posteriormente, fue llevado al Hospital Manuel Amador Guerrero. Desde allí, fue trasladado al Hospital Santo Tomás, en ciudad de Panamá, donde murió al día siguiente.

Como se ha reportado en días recientes, la Oficina Regional para las Américas de UNI global union está acompañando a los trabajadores de seguridad privada en Panamá, en un conjunto de iniciativas que están tomando sus dos organizaciones afiliadas en dicho país: Sindicato Industrial de Trabajadores Unidos de Seguridad (SITUS) y Unión Nacional de Trabajadores de Agencias de Seguridad (UNTAS), de cara a revertir la dramática situación que están afrontando alrededor de 17,000 hombres y mujeres que trabajan como guardias de seguridad en el país.

Para más información tomar contacto con: alberto.barrow@uniglobalunion.org