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Luego de dos semanas de protestas en varios puntos de Estados Unidos, los líderes del grupo OUR Walmart se congregaron en Arkansas donde se desarrolló la reunión anual de accionistas de la empresa. Los trabajadores de Estados Unidos y otros países siguen luchando por un salario justo y digno y la oportunidad de poder trabajar jornada completa.
En Estados Unidos, si bien Walmart había anunciado que aumentaría el salario de sus empleados, a día de hoy los trabajadores siguen en una situación difícil: salarios extremadamente bajos y, en la mayoría de los casos, dependen de programas de asistencia del gobierno para poder seguir adelante. Además, aquellos empleados que fueron notificados sobre la hora del cierre de cinco de las sucursales de la empresa siguen sin tener solución respecto a su situación laboral. No han sido relocalizados y la empresa habla de un cierre “indefinido”.
Por otro lado también en Bentonville varios trabajadores se concentraron bajo la consigna “Los Walton pueden pagarlo y sus empleados se lo merecen”. Es de conocimiento público que Walmart tiene los recursos necesarios para aumentar los salarios. La familia Walton, particularmente seis integrantes herederos de este imperio, ha duplicado su fortuna en los últimos años a 148.8 billones de dólares en detrimento de los trabajadores.
Los accionistas de la empresa han presionado para elegir un presidente independiente de la familia Walton. Sin embargo, como la familia Walton controla más del cincuenta por ciento de las acciones, el nuero del expresidente Rob Walton fue elegido.
A pesar de los problemas en Walmart, los trabajadores siguen luchando para mejorar sus condiciones laborales. El grupo OUR Walmart presentó varias propuestas y plantearon sus demandas frente a los accionistas.