Mensaje sobre el 1o de Mayo, Día Internacional de los Trabajadores y las Trabajadoras
Queridos compañeros y compañeras,
Conmemoramos este 1º Mayo de 2015 en un período de intensificación de las luchas de los trabajadores y trabajadoras por el derecho a la sindicalización, la negociación colectiva y en particular en defensa del derecho de huelga, amenazado constantemente por las presiones de empresas y de algunos gobiernos que lo quieren hacer desaparecer. Justamente este 1º de mayo estaremos a un año de los 130 años del inicio de la gran huelga en reclamo, entre otras reivindicaciones, de la jornada de 8 horas, que desembocó en la ejecución de los mártires de Chicago.
Como escribió el gran Eduardo Galeano, quien nos dejó hace poco y a quien aprovechamos para homenajear: “Ocurrió en Chicago, en 1886. El primero de mayo, cuando la huelga obrera paralizó Chicago y otras ciudades, el diario Philadelphia Tribune diagnosticó: El elemento laboral ha sido picado por una especie de tarántula universal, y se ha vuelto loco de remate. Locos de remate estaban los obreros que luchaban por la jornada de trabajo de ocho horas y por el derecho a la organización sindical”.
Este 1º de Mayo nos encuentra defendiendo las mismas conquistas, siempre amenazadas. Seguimos interpelando a un modelo de acumulación basado en la exclusión y el egoísmo; un modelo que a su paso solo genera violencia y desigualdad.
Este 1º de Mayo celebramos el éxito de intensas campañas de afiliación, que llevaron a la creación de nuevos sindicatos y al fortalecimiento de otros a lo largo y ancho del continente, lo que permitió avanzar en nuevas conquistas y mejorar las condiciones de empleo de miles de trabajadores, a través de la firma de convenciones colectivas.
Celebramos que la voz de las mujeres trabajadoras se está haciendo cada vez más potente, para reclamar una mayor inclusión en todos los ámbitos (laborales, sociales, políticos, sindicales) y fundamentalmente para luchar en contra de la vergonzosa brecha salarial y en contra toda forma de violencia.
Celebramos el espíritu de lucha de los trabajadores de la Región, que de Norte a Sur de nuestro continente han unido sus voces para reclamar más justicia y más inclusión. Celebramos a los héroes cotidianos, a aquellos que contra viento y marea siguen defendiendo el derecho humano de pertenecer a un sindicato y de reclamar colectivamente. Nos solidarizamos con todas y cada una de las luchas por más justicia y mejores condiciones de trabajo.
Estamos también junto a los sindicatos y al pueblo colombiano, que están dando una batalla crucial por ganar la paz. Nos unimos a ellos en el sueño de que el próximo 1o de Mayo encuentre a Colombia viviendo en una nueva era de su historia.
Finalmente, hacemos un llamado a todos los trabajadores y trabajadoras del Continente a unirse codo con codo contra cualquier intento, provenga de donde provenga, de desestabilización de los gobiernos democráticos de las Américas.
¡Viva el 1º de Mayo de los trabajadores y las trabajadoras!