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La oportuna reacción de nuestra Confederación Bancaria ante los anuncios del Superintendente de Bancos e Instituciones Financieras, de autorizar la apertura de los bancos durante el fin de semana con la excusa de la huelga de los trabajadores del transporte de valores, impidió que el derecho adquirido al descanso dominical y en día festivo fuera vulnerado.

Lo primero que hicimos fue poner en antecedente al Director del Trabajo, Cristian Melis,  respecto de la transgresión en que estaba incurriendo el Superintendente Erick Parrado, al autorizar a los bancos a abrir sus puertas los días festivos, introduciéndose además, en una negociación colectiva a favor del empleador al debilitar el poder de negociación de los trabajadores.

La segunda acción fue presentar un “recurso de queja” ante la

Contraloría General de la República para que investigara y fiscalizara las facultades del superintendente en esta materia. Esta acción, realizada en conjunto con los sindicatos en huelga de Prosegur y Brinks, contó con una fuerte cobertura periodística, que puso en antecedentes a la opinión pública y sobre todo, a los dueños de los bancos, respecto de lo problemático que podría llegar a ser el que siguieran las indicaciones del Superintendente Parrado, pudiendo caer en una ilegalidad al abrir las sucursales el feriado del 21 de mayo y el domingo siguiente.

Ese mismo día, enviamos una carta a todos los gerentes generales

 de todas las instituciones bancarias para advertirles que de abrir en los días señalados, estarían transgrediendo el Código Laboral y exponiéndose a que mañana los trabajadores también podrían violarla, norma que se posiciona por sobre las facultades de la Superintendencia y la Ley de Bancos.

Sabemos de buena fuente que hubo la intención de algunos bancos de abrir del 21 de mayo, como el BCI, por ejemplo, pero producto de nuestra fuerte oposición  no lo hicieron. Trascendió que el propio Ministerio del Trabajo tuvo que intervenir para que esos bancos no cometieran una ilegalidad.

Durante los días  jueves 21 y domingo 24 de mayo, se desplegó

una comitiva de dirigentes sindicales en las diversas comunas de Santiago para comprobar que se respetara la ley, reportando sólo un banco infractor: Banco Falabella, el que abrió sus sucursales ubicadas en algunos mall  y en sectores altos de la capital. Pero esto corresponde a una infracción denunciada hace un tiempo por la Confederación ante la Superintendencia de Bancos y sobre la cual se procederá durante el transcurso de esta semana en reunión ante el Superintendente de Bancos.

No obstante, este ha sido un pequeño gran logro de nuestra Confederación, que demuestra la necesidad de estar atentos y actuar unidos, no sólo como bancarios. Ya vemos como la huelga de los trabajadores del transporte de valores pudo habernos afectado gravemente. 

La lucha de unos es la lucha de todos.

DIRECTORIO NACIONAL

CONFEDERACIÓN BANCARIA