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Hizo referencia al Golpe, llamándolo Golpe moderno e institucional. Apuntó como quiebre del orden democrático y la falta del debido proceso legal al hecho de que un juez haya mandado a arrestar a un ex presidente, llevarlo a un aeropuerto e interrogarlo. Reforzó diciendo que Dilma no está siendo acusada de ningún crimen y no es parte de las investigaciones de la Lava Jato. Finalmente, dijo no concordar con las críticas a un gobierno que ha conseguido sacar a tanta gente de la pobreza, como en Brasil, destacando que la Economía brasileña ha sido considerada estable en los últimos 15 años.

Cuando le preguntaron, si todo lo que estaba diciendo era cierto, ya que la popularidad de la Presidente Dilma cayó de  un 80% a un 10%, fue categórico en afirmar que Dilma sufre ataques diariamente de los medios de comunicación dominados por grandes grupos empresariales que hacen un papel de oposición permanente al gobierno y aprovechan las investigaciones en marcha para crear un hecho político.

Respecto a Argentina, Philip fue firme al decir que el gobierno de Macri hasta el momento  no trajo soluciones para las cuestiones sociales; sino que al contrario, ha generado mucha preocupación. Criticó el hecho de darle prioridad a una política de inversión a corto plazo, a través de capitales especulativos de alta volatilidad, que pueden dejar el país en cualquier momento, sin generar ningún beneficio concreto para la sociedad. “El gobierno debería priorizar inversiones a largo plazo en proyectos de infraestructura que traiga beneficios para  el conjunto de la población” concluyó.